Cohesión del equipo

Los equipos de trabajo más eficientes son en los que existe una gran cohesión entre sus miembros, que se expresa en que se sienten orgullosos de pertenecer al mismo.

En contraste puede haber equipos disgregados, que es prácticamente lo mismo que una ausencia de equipo. Aquí cada miembro actúa por su cuenta, sólo le interesa su interés particular y no el del equipo. En esta situación es prácticamente imposible funcionar eficazmente. El profesor deberá intervenir disolviendo el equipo.

La cohesión no es algo que tiende a surgir de forma espontánea, es necesario que el profesor y el guía la propicien y trabajen con las siguientes estrategias:

• Una buena selección de alumnos.

• Por regla general los equipos pequeños tienden a estar más cohesionados que los grandes, por lo que deberán tener de 4 a 6 miembros.

• El proyecto asignado deberá ser interesante, exigente, motivador, de lo contrario es difícil que los alumnos se identifiquen con el equipo y más bien traten de salir del mismo a la menor oportunidad.

• El profesor deberá reconocer algún éxito inicial, aunque sea pequeño, estimulando que el equipo se perciba competente, capaz de alcanzar las metas propuestas.

• El profesor mediante asesorías deberá promover que ante una dificultad (ya sea que afecte al equipo en su conjunto o a un miembro determinado) los miembros del equipo hagan causa común, se involucran, tratan de encontrar una solución, eviten las críticas internas y se apoye al alumno afectado.

La respuesta del equipo dependerá en gran medida de la actitud que adopte su guía y el profesor-facilitador.